En 1259, en el poblado anexo en el que ejercía su señorio, Ximeno de Foces erigía a 2 Km. de distancia, el santuario dedicado a San Miguel, para panteón familiar -desde 1916 Monumento Histórico artístico- que es un bello edificio de sillería, en el que se mezcla el estilo románico y el gótico; tiene planta de cruz latina de tres ábsides, decorada con abundantes motivos de influencia árabe y pinturas con escenas de la vida de la Virgen, San Juan y La Crucifixión de Cristo; tiene bóveda apuntada, capiteles con ilustración vegetal y una hermosa portada; lugar en el que se protagonizan diversos relatos legendarios.
Su fachada recuerda a la de la catedralicia de Valencia, según se destaca en algunos estudios que se han realizado sobre este monumento. Se sabe de todos los modos que los canteros que la construyeron, trabajaron después en la catedral de Valencia; de hecho, la portada de ésta es una copia (aunque mejorada) de la de San Miguel. En 1280 la iglesia de San Clemente (Papa) de Ibieca, figuraba entre las integrantes del Arcedianato de la Diócesis oscense.
Los visitantes, además, podrán admirar bellos ejemplos de decoración mural que datan del primer tercio del siglo XIV (gótico lineal). Las pinturas más interesantes son las que decoran las tumbas de don Ximeno de Foces y su hijo Atho.
Plano de la ermita: http://www.altoaragon.org/foces/interiortemplo/
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